viernes, febrero 16, 2007

LO ENCONTRE POR AHI


¡Animo a rebajar!
Por Kathryn von Saalfeld
Nutricionista
kvsaalfeld@saborysalud.com


Más que contar calorías obsesivamente, se trata de estar motivado

Aunque usted haya tratado vilmente de rebajar esos 10 kilitos de más, o su doctor le haya recomendado bajar de peso por razones de salud, pelear la batalla del sobrepeso a veces parece imposible. Pero, no se dé por vencido; existen estrategias que le harán vencer al final.

El secreto no son ni las píldoras, ni el conteo obsesivo de calorías, ni tres batidos al día. El morirse de hambre y saltarse las comidas tampoco lo es. El simple hecho de iniciar un régimen alimentario sano, que sea bajo en grasa y calorías, agregando ejercicio físico a su rutina semanal, puede darle resultados exitosos. Sin embargo, puede ser aún más efectivo si se agrega el ingrediente secreto: la motivación.

Muchas personas se motivan a perder peso cuando tienen eventos importantes que están cerca. Puede ser una fiesta, unas vacaciones en la playa o una reunión de ex-compañeros, en donde quieran lucir en su mejor estado físico. Otras personas se proponen perder peso como resolución de año nuevo. Por otro lado, un susto hospitalario también motiva a las personas a cambiar sus estilos de vida. Y no hay que dejar de lado que solo es cuestión de apariencia, porque la salud también se beneficia.

La adopción de un plan alimentario sano de por vida puede ser de las mejores decisiones que se pueden tomar. Esos consejos (y recetas) le ayudarán a aumentar su motivación, mientras rebaja su peso!

Póngase metas pequeñas. No se concentre en perder 10 kilos. Concéntrese primero en perder 2 kilos, y así sucesivamente.
No se pese todos los días; es más factible ver resultados si se pesa una vez por semana. Recuerde que otra buena manera de controlar su pérdida de peso es por cómo le queda la ropa.
Distinga entre el hambre físico y el hambre psicológico. No coma solo por comer, o porque se siente estresado, ansioso o aburrido.
Motívese a controlar el tamaño de la porción que consume. Los alimentos bajos en grasa y calorías también pueden acumularse y hacer que gane peso.
Utilice el dinero que gastaría en postres, bocadillos y antojos, para ahorrar y meterse en un gimnasio.
Recuerde que no se trata de ver resultados en un día. Sea persistente, pórtese bien, y verá que no era tan difícil como usted pensaba

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